Casi un millón de mexicanos cancelaron su servicio de televisión de paga en 2022. Este sector, que incluye a empresas como Sky, Dish, Megacable, Izzi y Totalplay, experimentó un decremento anual en suscripciones de 3.8%, cerrando 2022 con un total de 24.3 millones de suscripciones, según datos proporcionados por el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT).
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Este declive se produce en un momento en que el sector de entretenimiento está lidiando con cambios en los hábitos en el consumo de contenidos y con la llegada de nuevos jugadores.
Según datos proporcionados por la consultora BB Media, las plataformas de streaming de video, como Disney, HBO Max, Netflix, ViX, entre otras, han logrado atraer a más de 9.4 millones de usuarios en México, que han optado por suscribirse a su variada oferta de contenidos entre 2015 y 2022.
Las plataformas de video bajo demanda han logrado captar la atención de los mexicanos de manera inmediata gracias a su modelo que permite ver contenido de su elección en cualquier momento y en el formato deseado, ya sea televisión, tableta o smartphone.
Esto contrasta significativamente con la televisión de paga, cuya estructura se basa en la programación fija de cada canal, lo que puede resultar restrictivo para los consumidores.
Ante la necesidad de mantenerse relevantes en el mercado, las empresas de televisión por cable han adoptado una estrategia de integrar a las plataformas a sus paquetes de televisión de paga, internet y línea telefónica (triple play).
Aunque esta táctica funcionó por un tiempo para retener suscriptores, en la actualidad no ha sido suficiente para consolidar un modelo de negocio o una fórmula de contenidos que les permita mantener cautivos a los suscriptores.
Los precios restan atractivo.
Claudia Benassini, especialista en temas de televisión restringida y plataformas digitales e investigadora de la Universidad La Salle, atribuye a dos factores la caída en suscriptores en el segmento de televisión de paga.
Uno, es el precio de la suscripción. La tarifa más básica de Sky, por ejemplo, tiene un costo de 349 pesos mensuales por sólo 90 canales, mientras que la suscripción mensual de una plataforma de streaming como Netflix cuesta 139 pesos al mes.
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