En un acto de trascendental relevancia para los derechos de los animales y la política social de la Ciudad de México, la jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, presentó una propuesta histórica para erradicar la violencia en las corridas de toros, destacando su compromiso con el bienestar animal sin afectar los empleos de quienes laboran en el espectáculo taurino. Acompañada de su gabinete y legisladores locales, Brugada delineó los principios que guiarán esta iniciativa, con el fin de posicionar a la capital del país como líder en la protección animal y la modernización de la tauromaquia.
El proyecto contempla la prohibición de corridas de toros con violencia, bajo un modelo que preserva la actividad en la Plaza México, pero ajustado a nuevas reglas que aseguren el respeto y protección de los toros. Entre las medidas destacadas, se prohíbe la muerte del animal en el ruedo, el uso de objetos punzantes como espadas y lanzas, y se limita la duración de cada corrida a 10 minutos por toro, con un tiempo total máximo de media hora.
Además, se establece la creación de la figura jurídica del espectáculo taurino libre de violencia, que permitirá que el toro, una vez concluido el evento, regrese a su ganadería.
Brugada enfatizó que la Ciudad de México se ha consolidado como la entidad más progresista en materia de derechos animales, subrayando que su administración se rige por los principios constitucionales que protegen la vida y el bienestar de los animales. En su discurso, la mandataria expresó que, si bien las tradiciones y la cultura son importantes, la sociedad y los derechos evolucionan, y por ello no se puede justificar el sufrimiento animal bajo el pretexto de la tradición.
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La propuesta de la jefa de Gobierno se produce en un contexto de creciente presión social, donde la ciudadanía exige una reformulación del espectáculo taurino. Con el respaldo de diversas organizaciones protectoras de animales y un diálogo abierto con todos los sectores involucrados, Brugada mostró su intención de crear un marco legislativo que reconcilie la defensa de los derechos animales con la conservación de los empleos en la tauromaquia.
Al concluir, Clara Brugada reafirmó su compromiso de transformar, no eliminar, la tauromaquia, apuntando hacia un modelo de espectáculo libre de violencia que se convierta en un referente global. La jefa de Gobierno destacó el esfuerzo conjunto de la sociedad, empresarios y organizaciones, y exhortó a mirar hacia el futuro en defensa de los derechos de todos.
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