Más de un siglo después de haber sido imaginado como una conexión estratégica entre los océanos Pacífico y Atlántico, el Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec es ya una realidad en marcha. Este ambicioso proyecto no solo articula trenes, puertos, carreteras y zonas industriales, sino que se consolida como una plataforma logística moderna con potencial global y profundo impacto social en el sureste del país.
A seis años de su puesta en marcha, el Corredor muestra resultados tangibles: líneas ferroviarias en operación, puertos modernizados y miles de toneladas de productos y pasajeros movilizados. De acuerdo con cifras oficiales, hasta mayo de 2025 se han transportado 466,884 toneladas de carga y 105,760 pasajeros, con trenes de hasta 260 contenedores y locomotoras de 4,000 caballos de fuerza.
Actualmente operan dos rutas clave del Ferrocarril Interoceánico:
- Línea Z (Coatzacoalcos–Salina Cruz): 308 km, con servicio de carga y pasajeros desde diciembre de 2023.
- Línea FA (Coatzacoalcos–Palenque): 330 km, en funcionamiento desde septiembre de 2024.
- La Línea K (Ixtepec–Puerto Chiapas), de 459 km, se encuentra en proceso de rehabilitación.
Los puertos del sureste mexicano han sido renovados para incrementar su capacidad operativa:
- En Coatzacoalcos, se reforzaron muelles y se profundizó el calado a 12 metros; en 2024 movilizó 27.7 millones de toneladas, ubicándose como el cuarto más importante del país.
- En Salina Cruz, se inauguró un rompeolas de 1,600 metros y en marzo de 2025 se concretó el primer cruce interoceánico con vehículos.
- En Dos Bocas y Puerto Chiapas, se concluyeron obras de dragado, defensas costeras y conexiones ferroviarias.
El proyecto contempla 12 Polos de Desarrollo, especializados en agroindustria, energías limpias, manufactura y farmacéutica. Estas zonas buscan atraer inversión nacional e internacional, y generar empleo local sostenible.
El Corredor Interoceánico también ha representado inversión social. Entre 2019 y 2024 se destinaron más de 80 mil millones de pesos en programas y obras comunitarias:
- 27,912 acciones de vivienda
- 1,402 electrificaciones rurales
- Construcción del Puente Jaltepec II, beneficiando a más de 25 mil personas
- 90 obras comunitarias que refuerzan la aceptación social del proyecto
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Con el despliegue de 2,400 elementos de la Secretaría de Marina en trenes, puertos y zonas industriales, el Corredor cuenta con un sólido esquema de seguridad que brinda certeza a inversionistas y tranquilidad a las comunidades.
El Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec no es solo un eje de comercio internacional. Es una política pública de alto impacto que busca cerrar las brechas regionales, generar oportunidades y abrirle al país una nueva puerta al mundo, con visión de futuro y profundo compromiso social.
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