Con el propósito de incentivar la labor de productoras y productores mexiquenses, la gobernadora Delfina Gómez Álvarez entregó más de 3.5 millones de pesos en apoyos y equipamiento a los ganadores del “Primer Concurso de Maíz Nativo y Amaranto”. Un total de 60 agricultores recibieron tractores, fertilizadoras, sembradoras y bombas de riego como reconocimiento a su trabajo en la preservación y cultivo de estos alimentos fundamentales.
“Transformar al campo es rescatar, proteger y promover nuestra identidad y resistencia como pueblo; es defender nuestra soberanía alimentaria y mejorar las condiciones de producción de vida de las campesinas y los campesinos que son corazón de nuestra tierra”, destacó la mandataria estatal durante la ceremonia de premiación.
María Eugenia Rojano Valdés, secretaria del Campo (SeCampo), subrayó que este concurso está respaldado por la Ley de Fomento y Protección del Maíz Nativo como Patrimonio Biocultural y Alimentario del Estado de México, lo que refuerza el compromiso del gobierno estatal con la preservación de estos cultivos ancestrales.
La convocatoria recibió 171 inscripciones, de las cuales se seleccionaron 60 finalistas mediante un jurado calificador conformado por expertos de instituciones académicas y de investigación. La evaluación incluyó un cuestionario basado en criterios de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la revisión de muestras para garantizar su calidad y autenticidad.
Con el fin de fortalecer la conservación del maíz nativo y el amaranto, la SeCampo ha establecido convenios de colaboración con diversas instituciones educativas y científicas, entre ellas la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), la Universidad Autónoma Chapingo (UACh) y la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEMéx).
Asimismo, se trabaja en conjunto con el Centro Internacional de Mejoramiento de Maíz y Trigo (CIMMYT), el Colegio de Postgraduados (COLPOS), la Comisión Intersecretarial de Bioseguridad de los Organismos Genéticamente Modificados (CIBIOGEM) y el Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (INIFAP).
“Buscamos desarrollar investigación aplicada, capacitación y transferencia de tecnología con un enfoque en sustentabilidad y agroecología, integrando el conocimiento científico con el saber ancestral de nuestros productores”, señaló Rojano Valdés.
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Como parte del compromiso con la investigación agropecuaria, la Secretaría del Campo entregó a la UNAM una muestra de semillas recolectadas en 2024, que incluyó 833 accesiones de maíz, donadas por 689 productores de 92 municipios mexiquenses. Esta iniciativa tiene el objetivo de mejorar las especies de polinización libre y desarrollar materiales mejorados en México.
Por su parte, Everardo Lovera Gómez, director general del Instituto de Investigación y Capacitación Agropecuaria, Acuícola y Forestal (Icamex), invitó a los ganadores del concurso a acercarse al Instituto para recibir acompañamiento y asesoría técnica.
Lovera Gómez destacó que el Icamex tiene la responsabilidad de proteger la reserva genética del maíz nativo, fomentar su regeneración y mejorar su diversidad en las comunidades rurales. Además, se actualizará el inventario y catálogo de las 18 especies de maíz nativo cultivadas en el Estado de México, asegurando su conservación para las futuras generaciones.
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