La salud mental, herramienta clave para resultados en deportistas
Por el Psic. Diego Dávila Cardoso
Durante mucho tiempo en los medios de comunicación deportivo en México, he escuchado comentarios que involucran a la psicología, mencionando frases como; “este deportista le faltó personalidad” o por el contrario “tiene mucha personalidad”, les falta motivación, se le ve muy ansioso… o a los mismos entrenadores en sus conferencias de prensa hablando acerca de la falta de atención, concentración, inteligencia emocional, el estrés, entre otras variables psicológicas.
Platicando con colegas y amigos sobre este tema y en una época post pandemia, parte de la sociedad, hemos puesto más atención a nuestra salud mental, lo que tal vez antes pasaba desapercibido y en el deporte no es la excepción.
Deportistas como Michael Phelps, Naomi Osaka, Simone Biles, Andrés Iniesta y mexicanos como Miguel Layún o Henry Martín, han hecho pública la necesidad de atención a su salud mental derivado de problemas personales y/o profesionales a los cuales se les ha aplaudido por su decisión, pero ¿por qué a pesar de estos casos públicos no se le da la importancia necesaria?
Y la respuesta podría variar de persona a persona, de deportista a deportista, pero el pensamiento más común será todo este estigma y/o las repercusiones mediáticas que podrían influir en ellos en la élite profesional en su deporte, y esto puede verse ante los demás como una debilidad o “estar loco”, lo que perjudicaría en patrocinios, credibilidad deportiva y hasta en su permanencia en el deporte. Por tanto, los deportistas a nivel profesional no solo están exentos a sufrir problemáticas en su bienestar psicológico derivados del propio deporte, sino también por la exposición en los medios de comunicación y las consecuencias que se convierten en críticas de los propios aficionados dirigidas no solo a su vida profesional sino también a su vida privada. Al igual que los entrenadores, quienes, por su naturaleza, también se les crítica y se les ejerce presión cuando las cosas no salen del todo bien, causando en ellos burnout, ansiedad y depresión, por mencionar algunas de las causas.
Pero, si durante todo este tiempo, los medios de comunicación, los directivos de instituciones, los entrenadores y hasta los mismos deportistas saben de estás necesidades psicológicas ¿Por qué no se hace nada al respecto?
Y regreso al comentario de líneas pasadas… Es cierto que, todos estos personajes tal vez no tienen un panorama completo y para ello será necesario llevar información clara y con sustentos validados que sea visible, de apoyo para todos, en la obtención de resultados de desempeño óptimo de sus habilidades y entrenamiento mental en todos los niveles, apoyados de un equipo multidisciplinario que brinde el entorno adecuado para la profesionalización de cada una de las habilidades.
Por tanto, el psicólogo del deporte no solo ve por el bienestar psicológico del deportista o entrenador sino también potencializa sus herramientas con base en el entrenamiento psicológico, mencionando por ejemplo técnicas para el manejo de la ansiedad, el estrés, la atención – concentración, apoyo en la adecuación de pensamientos, objetivos a corto, mediano y largo plazo y diversas herramientas especializadas en cada uno de los deportes, pero también apoyando a los directivos en la realización de proyectos para niños y adolescentes en el desarrollo del deporte por mencionar algunos ejemplos.
No obstante, las funciones del psicólogo especializado en el deporte no solo se adecuan a deportistas de alto rendimiento, sino también en personas que practican el deporte de manera regular, como lo son corredores, maratonistas, ciclistas de ruta o montaña, jugadores de futbol, basquetbol, voleibol o tenis solo por mencionar algunos y deportes desde su iniciación, tomando como principal enfoque a niños y niñas que comienzan en alguna actividad física.
Como puedes observar, el psicólogo en el deporte es tan necesario como un médico, fisioterapeuta o nutriólogo para el desempeño completo de cualquier persona dentro del deporte, pero no sustituirá cualquier otro rol como podría ser el del entrenador o alguna otra figura representativa.
Nuestros y nuestras deportistas mexicanos tienen habilidades extraordinarias, pero para competir en el deporte será de vital importancia incrementar la participación y cambiar la percepción que se tiene del psicólogo con programas específicos para el desarrollo de las habilidades físicas, técnico tácticas y psicológicas en el deporte con apoyo de todo el gremio deportivo y continuar con la divulgación de la salud mental que resulta tan importante en nuestros días.
Diego Dávila Cardoso es Licenciado en Psicología por la Universidad del Valle de México, con formación en psicología clínica, social, educativa y organizacional.
Máster en Psicología del Deporte por la Sociedad Iberoamericana de Psicología del Deporte (En curso).
Cursos “Bases prácticas de la Psicología del Deporte”, “Herramientas Psicológicas para el entrenador deportivo”.
Diplomado “Psicología y Rendimiento Deportivo”.
Certificación Entrenador profesional de pesas Wabba.
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