Amigos de Picotazo Político, seguimos cubriendo de cerca el histórico proceso de elección de jueces en el Poder Judicial. Hoy les presentamos a Erika Yazmín Zárate Villa, quien busca ser jueza penal en los distritos de Iztapalapa y Tláhuac, figurando en la boleta amarilla número 15.

Con 17 años de experiencia en la defensa de los derechos humanos, Yazmín deja claro su compromiso: “Mi vocación es proteger los derechos de las personas, siempre anteponiendo la justicia sobre cualquier interés”.
Las carencias del sistema penal.
En su recorrido por las alcaldías, Erika ha escuchado a las víctimas del delito expresar una preocupación recurrente: la percepción de que sus derechos no son reconocidos. Ella lo resume con precisión:

“Muchos no saben que tanto víctimas como acusados tienen derechos claros en el artículo 20 constitucional. Mi labor será garantizar que esos derechos se respeten”.
Combate a la impunidad desde el Poder Judicial
Aunque aclara que la política de seguridad es tarea de otras autoridades, Yazmín subraya el peso de su función:
Te puede interesar: Grupo Firme presentó su “Evolución” en San Luis Potosí
“El juez debe decidir con base en pruebas, sin sesgos ni prejuicios. Solo así se combate la impunidad”.

Justicia accesible y sin tecnicismos.
Un punto crucial para recuperar la confianza ciudadana es la transparencia. Erika propone sentencias claras, comprensibles para todos, sin lenguaje técnico innecesario:
“Las personas merecen entender por qué se tomó una decisión judicial. La justicia no debe ser un privilegio de expertos”.

Procesos con perspectiva de género y sin nepotismo
Sobre la perspectiva de género, advierte que no basta con discursos:
“Hay que erradicar los sesgos culturales y valorar las pruebas con objetividad, especialmente en casos de mujeres o grupos vulnerables”.
Además, Yazmín enfatiza su rechazo al nepotismo:
“Los cargos deben ganarse por méritos, no por influencias. Eso es lo que siempre he defendido”.

Un compromiso de cercanía
Finalmente, su propuesta es clara:
“Ser jueza penal no es un premio, es una responsabilidad. Estaré presente en el juzgado, cumpliendo con mi deber y rindiendo cuentas a la sociedad”.
Así, Erika Yazmín Zárate Villa invita a reflexionar: la justicia no se construye desde el poder, sino desde la cercanía con la gente.
Más historias
UNAM reasignará recursos para apoyar alimentación estudiantil
IECM concluye entrega de insumos para elección judicial
Entregan apoyo para útiles y uniformes 2025 en CDMX