¿La edad impacta en el desempeño de un legislador?
Por Horacio Rafael Rodríguez Montalvo
Nos encontramos en la discusión actual de la nueva reforma de disminuir la edad de 21 a 18 años como requisito para ser legislador en México. Es muy interesante escuchar las distintas voces, en ya una sociedad muy polarizada, que sólo considera la agresión como herramienta de llegar a “acuerdos”. En toda encuesta que se aplica sobre la opinión que tiene la sociedad sobre los representantes de los poderes: legislativo, judicial y ejecutivo, se tiene una visión de personas desobligadas, sin interés por las necesidades de la población y hasta de ladrones, todo esto sin distinción de edad, credo, partido o sexo. Realmente el brindar este derecho es justo para la participación juvenil en los grandes retos que enfrenta nuestro país. Sólo que, con la finalidad de lograr una selección de miembros con gran potencial, se debería también señalar requerimientos de formación que garanticen su participación de forma activa. Hoy la edad no tiene que ser un inconveniente en ningún área, los cambios que se presentan cada vez son más rápidos y necesitan ser atendidos por quienes pueden ser los primeros afectados. Así como es ideal tener representantes de distintas generaciones con un enfoque de filantropía, conocimiento social y actitud de servicio.
Otro de los puntos que señalan como negativo en el cambio de la edad es el nepotismo, acción que hasta la fecha se aplica sin ninguna limitante. Cuestión que nos ha llevado a tener funcionarios por décadas, al haberles heredado los puestos y la trayectoria política que les permite vivir del erario.
Considero que los elementos que utilizan para criticar esta nueva edad, no tienen un soporte significativo y sí un enorme campo de posibilidades en donde se puede involucrar a nuevos talentos, al final dependerá de nuestro voto el darles o no la oportunidad. Eso los deberá llevar a ser creativos e ingeniosos para lograr la confianza de los votantes, ser disciplinados para demostrar el gran acierto de ser considerados en ocupar puestos de influencia en el bienestar de la comunidad y mi mayor esperanza, el dar un estímulo que despierte a una juventud que ha caído en un conformismo tanto intelectual como profesional.
Nuevamente pueden pensar que soy un soñador, pero mi labor es dar mi opinión sobre comportamiento, la propuesta tiene un gran potencial en la modificación de muchas conductas que hoy tiene harto a quienes no pertenecen a un partido político y para un pensamiento que lleve a México a no seguir atrasado de la modernidad.
Horacio Rafael Rodríguez Montalvo es egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Licenciado por la Facultad de Psicología, con formación en psicología clínica, educativa, organizacional y social.Maestría y doctorado en ciencias de la administración, con especialidad en comportamiento organizacional.
Doctorante en la Facultad de medicina, en el área de ciencias de la salud con especialidad en salud mental en el trabajo.
Consultor y conferencista en transformación organizacional – humano, en diversas empresas privadas y públicas. Docente en los niveles de licenciatura, maestría, doctorado, especialidad y diplomado, en las carreras de: Psicología, administración, educación, mercadotecnia, alta dirección y desarrollo humano.
Especialista invitado en programas radiofónicos, publicaciones en periódico, revistas impresas/ electrónicas, redes sociales, plataformas y televisión con temas del comportamiento humano.
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