El Costo de una Política Deportiva Fragmentada
Por el Dr. Horacio Rafael Rodríguez Montalvo
La política deportiva en México ha sido un tema de creciente discusión y crítica en los últimos años, y más en estos momentos al terminar los juegos olímpicos de París 2024. A pesar de ser un país con un vasto potencial atlético, la falta de infraestructura adecuada, la gestión ineficiente de recursos y las políticas inconsistentes han limitado el desarrollo del deporte en el país. Estas críticas han sido impulsadas tanto por la comunidad deportiva como por el público en general, quienes ven el potencial desperdiciado y la falta de apoyo a los deportistas como obstáculos para alcanzar un nivel competitivo internacionalmente.
Una de las críticas más frecuentes a la política deportiva en México es la insuficiencia de infraestructura adecuada para el desarrollo deportivo. Muchos atletas, especialmente aquellos que no están en deportes de alto perfil como el fútbol, enfrentan desafíos para acceder a instalaciones de entrenamiento de calidad. Esto no solo afecta su desarrollo, sino también sus posibilidades de competir en igualdad de condiciones a nivel internacional.
El presupuesto destinado al deporte en México ha sido objeto de debate. La falta de inversión en infraestructura deportiva, programas de desarrollo y apoyo a deportistas de alto rendimiento es vista como una barrera para el progreso. Además, la distribución de recursos suele ser desigual, con una mayor atención a los deportes que generan más ingresos, dejando a otros en el olvido.
Otro problema significativo en la política deportiva mexicana es la corrupción y la gestión ineficiente de los recursos. Casos de desvío de fondos, falta de transparencia en la asignación de recursos y favoritismo en la selección de deportistas y entrenadores han erosionado la confianza del público en las instituciones deportivas del país. Esta mala gestión no solo afecta a los deportistas, sino que también socava la credibilidad del sistema deportivo mexicano en general.
La corrupción también se manifiesta en la falta de claridad en los criterios de selección para competencias internacionales, lo que ha llevado a controversias y descontento entre los atletas. La percepción de que las decisiones se basan más en conexiones personales que en méritos deportivos alimenta la frustración y desilusión en el ámbito deportivo.
La falta de una política deportiva consistente y a largo plazo es otra crítica central. En México, los cambios de administración suelen traer consigo nuevas políticas y enfoques, lo que a menudo interrumpe el progreso y la implementación de programas deportivos. Esta falta de continuidad afecta negativamente a los atletas y entrenadores que dependen de un apoyo constante para alcanzar su máximo potencial.
Además, la poca atención a la educación física en las escuelas y la falta de programas para detectar y desarrollar talentos desde una edad temprana han limitado el crecimiento del deporte en el país. En lugar de un enfoque estratégico y a largo plazo, la política deportiva en México parece estar más centrada en resultados a corto plazo, lo que impide la construcción de una base sólida para el desarrollo deportivo sostenido.
Las críticas a la política deportiva en México se reflejan en los resultados internacionales. Aunque México ha tenido éxitos notables en deportes como el boxeo, el fútbol y la marcha, en general, el país no ha logrado posicionarse consistentemente como una potencia deportiva en eventos internacionales como los Juegos Olímpicos. La falta de preparación adecuada, apoyo insuficiente y una estructura deportiva deficiente contribuyen a tener bajos resultados.
Los atletas que logran destacar en el escenario internacional a menudo lo hacen a pesar del sistema, no gracias a él. Muchos de estos atletas dependen de patrocinadores privados o de su propia determinación y recursos para alcanzar sus metas, lo que resalta las deficiencias del apoyo gubernamental.
Ante estas críticas, se hace evidente la necesidad de una reforma integral en la política deportiva en México. Esto implica no solo una mayor inversión en infraestructura y recursos, sino también un cambio en la cultura de gestión y la implementación de políticas a largo plazo que prioricen el desarrollo deportivo desde las bases.
Doctor en la Facultad de medicina, en el área de ciencias de la salud con especialidad en salud mental en el trabajo. Consultor y conferencista en transformación organizacional – humano, en diversas empresas privadas y públicas.
Docente en los niveles de licenciatura, maestría, doctorado, especialidad y diplomado, en las carreras de: Psicología, administración, educación, mercadotecnia, alta dirección y desarrollo humano.
Especialista invitado en programas radiofónicos, publicaciones en periódico, revistas impresas/ electrónicas, redes sociales, plataformas y televisión con temas del comportamiento humano.
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