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Dr. Horacio Rafael Rodríguez Montalvo

La Política Desde la Psicología

No cabe duda de que las redes sociales han cambiado los estilos de vida de las personas.

Mayor emocionalidad y menor pensamiento, estrategia política en las benditas redes sociales

Por el Dr. Horacio Rafael Rodríguez Montalvo

No cabe duda de que las redes sociales han cambiado los estilos de vida de las personas. Hoy tienen distintas aplicaciones como el encontrar antiguas amistades, ser una gran herramienta para la venta de muchos comerciantes, ayuda en la búsqueda de personas o mascotas extraviadas, da oportunidad a desarrollar las habilidades de comunicación o lograr el sueño de aquella persona que desea ser conocido como una estrella en su área de dominio (comedia, academia, ventas, etc.). Por supuesto la mercadotecnia política no podía quedarse atrás, sabiendo el enorme alcance que tiene y el alto consumo que la población realiza de las redes sociales. 

¿Qué estrategia han seguido para que la gente los vea?

Inicialmente uno pensaría que se buscaría ver los resultados, logros o por lo menos las propuestas que han llevado a cabo durante su trayectoria como funcionario público. Pero en una sociedad dividida y estimulada constantemente para desconfiar de los que piensan distinto a uno, nos lleva a considerar mentiras los que se publique, o nos vamos hasta el otro lado, que se da por cierto todo lo que publiquen en quienes creemos- En ambos casos, el enorme problema es que se toma partido sin la más mínima investigación. 

Está situación se conoce como infodemia, la cual consiste en esparcir información que genera emocionalidad en quienes los ven sin verificar la certeza o fuente que la genera. El punto psicológico explotado por los que generan los contenidos de las redes sociales es la emocionalidad, la cual es base para decidir si dan el like o el dan seguimiento al perfil de quienes publican para recibir más de su material.

Estamos próximos a elecciones, tanto estatales en este año, como federales para el siguiente. Los considerados candidatos han puesto a trabajar sus redes sociales de forma constante y dando cumplimiento a lo identificado, en distintas encuestas, de lo que el electorado desea ver de ellos. Es el motivo de que tenemos funcionarios rapeando, bailando, usando filtros, o “cotorreando” con los “influencers” del momento. Lo importante es generar emociones, no razonamiento, no análisis o distraer la atención de alguna situación no favorable para quien es candidato. 

Nuestra intención no es criticar el gusto por ese material, sino invitar a la reflexión del material que hay y habrá respecto a las personas que buscaran un puesto de gobierno. Investigar sus logros, trayectoria y propuestas que darán en caso de ganar las elecciones. Así mismo, conservar material donde queden grabadas las promesas de campaña que realicen para usarlo en la exigencia de resultados. De la misma manera, se busca hacer consciencia para no creer toda la información que se lea para prevenir el desborde de emociones, lo cual puede llevarnos a situaciones que generen problemas a nivel personal, social o institucional. 

Algunos pensaran que se pretende reprimir el derecho de expresión, al sugerir qué y cómo leer las redes sociales, lo cual es un gran error, debido a que, en el proceso psicológico del pensamiento, es muy útil el conflicto, que es la diferencia de ideas, pensamientos o creencias entre individuos, que puede utilizarse para la generación de nuevos conocimientos o estrategias de crecimiento mutuo. Entonces es genial que tengamos tantos puntos de vista, formas de expresión y participantes, sólo requerimos, los que consumimos sus mensajes, mantener siempre la discusión en el nivel de las ideas y no del desborde de emociones que generen violencia. 

Tengamos presente que las personas que tienen a su cargo la elaboración de contenido para las redes sociales de los políticos, aplican la premisa “las personas olvidan lo que dicen, olvidan lo que les den, lo que nunca olvidan es como lo hacen sentir”. Y esto lo podemos demostrar con un ejercicio muy sencillo, que pongo a continuación: estimado lector, por favor te pido que traigas a tu memoria el último enojo fuerte que has vivido, puede que haya sido hoy o hace 4 años, sólo recuerda esa vez que estuviste furioso…. ¿ya quedo? Te pido avanzar sólo cuando tengas este recuerdo. Una vez que cumpliste con esta petición te hago la siguiente pregunta ¿en qué parte del cuerpo SIENTES este enojo?, permíteme jugar al adivino y te diré que seguro lo sientes en el estómago, ¿es correcto?, como puedes ver, las emociones duran y generan una consecuencia, como, por ejemplo: enfermedades como la gastritis o colitis, entre otras.

Y si a este ejercicio le agregamos la premisa de que es más fácil contagiar una emoción que un pensamiento, entonces reforzamos la idea de ponernos cada uno de nosotros la meta de ser responsables de que las redes sociales sean herramientas y no armas.

Horacio Rafael Rodríguez Montalvo es egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

Licenciado por la Facultad de Psicología, con formación en psicología clínica, educativa, organizacional y social.

Maestría y doctorado en ciencias de la administración, con especialidad en comportamiento organizacional.

Doctorante en la Facultad de medicina, en el área de ciencias de la salud con especialidad en salud mental en el trabajo.

Consultor y conferencista en transformación organizacional – humano, en diversas empresas privadas y públicas.

Docente en los niveles de licenciatura, maestría, doctorado, especialidad y diplomado, en las carreras de: Psicología, administración, educación, mercadotecnia, alta dirección y desarrollo humano.

Especialista invitado en programas radiofónicos, publicaciones en periódico, revistas impresas/ electrónicas, redes sociales, plataformas y televisión con temas del comportamiento humano.

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