En noviembre de 2023, el mercado laboral mexicano sufrió un fuerte revés al registrar la pérdida más significativa de empleos del año, según datos recopilados por la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE).
La economía enfrentó una disminución de 1.2 millones de puestos de trabajo, eclipsando las cifras negativas observadas en meses anteriores.
El impacto de esta baja fue especialmente notorio en el sector informal, donde el 87% de los empleos desaparecidos se concentraron, agravando aún más la precaria situación laboral en este segmento de la población.
Esta contracción laboral prácticamente duplicó la desaparición de empleos en mayo, que hasta entonces era el dato más alto del año.
A pesar de este sombrío panorama, la tasa de desempleo se mantuvo en un relativamente bajo 2.7%, cerca de su mínimo histórico registrado este año. Sin embargo, al incluir a las personas “disponibles” de la Población No Económicamente Activa (PNEA), la tasa de desempleo extendido aumentó del 10.4% al 10.9%.
En cuanto a la tasa de participación, esta aumentó en 0.5 puntos porcentuales, alcanzando el 61.0%, la cifra más alta desde noviembre de 2015.
Te puede interesar: Habrá reuniones en CDMX para tratar tema de migrantes: Batres
A su vez, la tasa de informalidad disminuyó de 55.4% a 54.7%, marcando su segundo mejor nivel del año.
Sin embargo, el crecimiento de la población ocupada se vio obstaculizado, ya que solo el trabajo no remunerado mostró un aumento (+52,737).
El trabajo por cuenta propia fue el más afectado, registrando una disminución de 764,502 personas.
Además, la subocupación, que engloba a aquellos que necesitan ofrecer más horas de trabajo de las que el mercado laboral les proporciona, aumentó del 7.9% al 8.1%.
Cuando se consideran trabajadores desocupados, subocupados y disponibles de la PNEA, la brecha laboral, un indicador más amplio de la necesidad de empleo, también experimentó un aumento de 0.8 puntos porcentuales, llegando a un preocupante 18.2%.
En medio de este panorama desafiante, la manufactura emerge como un “oasis en el desierto”, creando 570,289 puestos de trabajo en noviembre.
Este sector contribuyó al balance general positivo del sector industrial, que registró un total de 237,295 empleos creados.
Por otro lado, el sector de agricultura, ganadería y pesca sufrió una disminución de 646,736 puestos de trabajo, mientras que las actividades de servicios experimentaron la pérdida más significativa, con una reducción acumulada de 811,154 plazas.
Sin embargo, vale destacar que los servicios profesionales (+249,862) y los restaurantes (+40,672) fueron excepciones positivas en un panorama generalmente sombrío.
El mercado laboral enfrenta desafíos significativos en el cierre del año, y la recuperación económica sigue siendo un objetivo esquivo para muchos.
La atención se centra en las medidas gubernamentales y empresariales para abordar esta crisis laboral y revertir la tendencia negativa que ha marcado el 2023.
Más historias
Concluye comparecencia del secretario de Hacienda ante diputados
Senado turna a comisiones tres iniciativas clave sobre el Poder Judicial
Sheinbaum lidera conmemoración de la Revolución Mexicana en el Zócalo