El inusitado poder que han adquirido las fuerzas armadas en México ponen al país en riesgo de que se constituya indebidamente en un estado policiaco militar, por lo cual el poder militar, político y económico que tiene ahora el ejército requiere de contrapesos, así como una democratización interna que aún está pendiente, tal y como lo exigía el general José Francisco Gallardo Rodríguez.
Así lo señaló la organización civil Mexicanos Unidos durante el homenaje al general Gallardo, a dos años de su muerte.
De igual manera destacaron que hoy en México las fuerzas armadas tienen un régimen jurídico de excepción frente al resto de la administración pública en materia de tratamiento presupuestario, salarios, responsabilidades administrativas y penales, e incluso en su sistema de adquisiciones y compras.
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En ese contexto, Jaime Cárdenas, investigador del Instituto de Investigaciones Jurídica de la UNAM, recordó que algunos de los ideales del general Gallardo eran la creación de un ombudsman para las fuerzas armadas y la democratización de éstas.
Aseguró que, como lo pensaba el general, todo proceso de democratización de un país debe pasar por la democratización de sus fuerzas armadas, asunto pendiente aún en México, y consideraba que la separación de las fuerzas armadas de la vida civil de México era fundamental, es decir que el ejército no tomara parte en tareas de seguridad pública. El académico afirmó que el ejército le debe al general Gallardo una profunda rehabilitación de sus ideales.
Por su parte, Juan José Dávalos, catedrático de la UNAM, resalto en tanto la obra académica del general Gallardo, con importantes aportaciones en la administración pública y la ciencia política, así como la defensa que hizo de esta institución como una universidad pública. El académico comparó al general con grandes militares en la historia de México como Vicente Guerrero, José María Morelos y Felipe Ángeles, entre otros.
En su oportunidad, representantes de la Asociación Nacional de Abogados Democráticos, entre ellos Bertha Galeana, recordaron el proceso legal que llevó, junto con muchos otros organismos, a la excarcelación del general Gallardo, quien había sido acusado de injurias por exigir la democratización del ejército y la creación de un ombudsman militar.
Al respecto, Francisco Gallardo hijo, mencionó que hubo muchas organizaciones nacionales e internacionales, entre ellas la Comisión Interamericana de Derechos Humanos, que denunciaron la injusticia cometida al general por muchos años y resaltó los múltiples logros militares, académicos y deportivos de su padre.
Felipe de Jesús González, representante de la Comunidad Triqui de la Ciudad de México, destacó el interés que el general tuvo hacia los grupos originarios del país, mismos que tienen 500 años de resistencia defendiendo sus derechos, tierras y lenguas en muchas regiones del país. Afirmó que aún quedan muchos pendientes de las administraciones anteriores con respecto a los grupos indígenas y las que se gestan en este sexenio.
El anfitrión de este homenaje, Porfirio Martínez, de Mexicanos Unidos, aseveró que la conducta militar honorable y el apego a la ley del general Gallardo le gano la admiración y respeto de muchos, pero también la envidia y animadversión de otros.
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