En el marco del Plan México, el Gobierno de la República, a través de la Secretaría de Economía, anunció que ya están en marcha 11 Polos de Desarrollo Económico para el Bienestar (PODECOBI), se han aprobado otros 14, y cuatro más se encuentran en proceso de evaluación. Estas acciones, orientadas a la promoción de inversiones productivas con sentido social, forman parte de una estrategia de desarrollo territorial que busca generar oportunidades en regiones históricamente marginadas.
Durante su conferencia matutina “Las mañaneras del pueblo”, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo destacó que estos polos son una herramienta clave para fortalecer el modelo económico de la Cuarta Transformación, basado en el principio de “por el bien de todos, primero los pobres”. Reiteró que este enfoque, definido como economía moral y de prosperidad compartida, ha probado su efectividad al priorizar a quienes más lo necesitan.
“México no requiere un cambio de modelo. La economía va bien porque se ha sembrado desde abajo. Cuando se apoya a los que menos tienen, se fortalece el país entero”, afirmó Sheinbaum. Añadió que los incentivos a inversionistas —que serán publicados en el Diario Oficial de la Federación— contemplan deducciones fiscales de hasta el 100% en activos fijos nuevos, así como estímulos a la capacitación dual y a la innovación.
Los Polos para el Bienestar estarán ubicados estratégicamente cerca de viviendas, escuelas y servicios de salud, con el fin de mejorar las condiciones de vida de quienes laboren en ellos. Además, algunos de estos parques industriales contarán con concesiones de terrenos federales, estatales o municipales, así como beneficios fiscales como la reducción del ISR y del IVA, especialmente en aquellos a cargo de la Secretaría de Marina o ubicados en zonas fronterizas como Tapachula.
Por su parte, el secretario de Economía, Marcelo Ebrard Casaubon, explicó que los PODECOBI están diseñados para atraer inversión en sectores estratégicos como la agroindustria, automotriz, aeroespacial, farmacéutica, semiconductores, energías limpias y economía circular, entre otros. Uno de los objetivos centrales, señaló, es fortalecer la cadena de valor nacional y vincular a pequeñas y medianas empresas (pymes) con procesos industriales de alto impacto.
Actualmente, los 11 polos en operación están vinculados principalmente al Corredor Interoceánico del Istmo de Tehuantepec, abarcando los estados de Veracruz, Oaxaca, Tabasco y Chiapas. Destacan los polos en Coatzacoalcos, Salina Cruz, Ixtepec y Dos Bocas, además de Tapachula I y II.
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Entre los 14 polos ya aprobados se encuentran sedes industriales estratégicas como Juárez (Chihuahua), Celaya (Guanajuato), Altamira (Tamaulipas), Chetumal (Quintana Roo), el AIFA (Hidalgo) y Ciudad Modelo (Puebla). Mientras tanto, cuatro más —ubicados en Yucatán, Guerrero, Coahuila y Sonora— se encuentran en etapa de evaluación.
A futuro, se contempla la expansión del programa a más entidades federativas, incluyendo Aguascalientes, Jalisco, Nuevo León, Querétaro y Ciudad de México, con lo cual se ampliaría el alcance territorial de esta política de desarrollo integral.
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