Tener al América en su tercera final consecutiva no es suficiente, Ángel Villacampa, artífice de esta obra en el banquillo azulcrema no sólo tiene la exigencia a tope en su vestidor por levantar la copa, para él las formas importan. El estratega azulcrema que llegó a Coapa en el Apertura 2022 para cambiar la historia, quiere que su plantel se quede en la memoria de los americanistas por muchos años, y esta final ante Tigres es el momento perfecto para conseguirlo.
“Nosotras no buscamos emular a nadie, queremos una identidad propia, eso se hace a través de trabajos, de hábitos, de mejoras individuales. No vamos más a lo de lo que queremos ser nosotras sin saber que queremos ser un América campeón, que se pueda recordar, no sólo por títulos sino también por juego”, comentó el técnico azulcrema, además de confesar que internamente no quedan satisfechas si no demuestran superioridad en el campo.
“Es una responsabilidad estar nuevamente en una final, porque mañana nos vamos a presentar en nuestra casa y esa responsabilidad de no fallar. Queremos que el americanismo se sienta orgulloso de lo que están haciendo estas jugadoras, ellas están aceptando un compromiso por el grupo y me siento muy orgulloso de lo que han logrado”, apuntó.
Ser fieles al futbol que han mostrado a lo largo de año y medio desde su llegada es primordial, inclusive ellas son su principal juez cuando no lucen en el terreno de juego.
“Nuestro compromiso mayor es no defraudarnos, eso será fundamental, mañana aunque ganamos, si ganamos de una manera que no nos reconocemos, si no estamos conformes con el juego habrá enojo en el vestuario. Es la obligación que tenemos, no vamos a fallar a nuestra afición, a nuestra gente, hay que ser fieles al trabajo que hemos hecho, a la idea que tenemos”, agregó.
Ser el primer entrenador en la historia del Club América en colocar al equipo en tres series por el título de manera consecutiva no le motiva, desde su arribo a México su objetivo fue aportar al desarrollo de la liga y de su plantel, lo cual se está logrando. “Lo menos importante soy yo ahora mismo, lo que significa para mí es el progreso de ellas, el rendimiento, esto ya me llena como entrenador, pase lo que pase se ganaron mi corazón en muchas maneras”.
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