El Instituto Electoral de la Ciudad de México (IECM) ha sancionado a Alessandra Rojo de la Vega por agredir e invisibilizar sistemáticamente a Caty Monreal en diversos medios de comunicación y redes sociales. Tras conocer la resolución de la Comisión Permanente de Quejas del IECM, Monreal afirmó que seguirá denunciando estas conductas en todas las instancias judiciales y electorales.
“La violencia política contra las mujeres en razón de género no debemos de normalizarla. Yo sufrí de parte de mi agresora durante varios meses que me quedé callada, pero ya no me quedaré callada ante su violencia y ante sus agresiones e iré a todas las instancias que sean necesarias y la ley y el derecho me respalde”, subrayó Monreal.
La resolución del IECM ordena a Rojo de la Vega la suspensión inmediata de la difusión de contenidos referentes a “los Monreal”, “El Monrealato” y similares.
Además, deberá ofrecer disculpas públicas, que deben ser difundidas en los mismos medios donde expresó sus agresiones hacia Monreal, y mediante un escrito con el nombre y apellidos de la morenista. También, Rojo de la Vega deberá realizar y acreditar cursos de sensibilización ordenados por la autoridad electoral para inhibir cualquier ánimo de volver a ejecutar esas agresiones hacia Monreal o cualquier otra mujer.
En su dictamen, la Comisión de Quejas resolvió que las frases y acusaciones de Rojo de la Vega no están amparadas por la libertad de expresión, ya que reflejan una intención de afectar o borrar la imagen pública de Caty Monreal.
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Por ello, consideran que las medidas adoptadas no son desproporcionadas ni injustificadas, ya que persiguen el fin legítimo de excluir del debate público cualquier expresión que afecte el derecho de las mujeres a vivir libres de violencia y participar en política en condiciones de igualdad.
“Alessandra Rojo de la Vega ha venido realizando sistemáticamente discursos basados en violencia política contra las mujeres en razón de género, mediante descalificación política inmersa en estereotipos de género, al realizar manifestaciones ante medios de comunicación en las que invisibilizaba a la candidata Caty Monreal”, destaca el texto del IECM.
Caty Monreal recordó que el Estado Mexicano ha suscrito un importante número de convenciones sobre Derechos Humanos de las mujeres, adoptando compromisos que han contribuido significativamente al avance de la igualdad de género.
La ley procesal, en sus artículos 20 Bis y 20 Ter, es clara al referir que la Violencia Política hacia la Mujer en Razón de Género es toda acción u omisión ejercida dentro de la esfera pública que tenga por objeto o resultado limitar, anular o menoscabar el ejercicio efectivo de los derechos político-electorales de una mujer.
En la queja presentada por Monreal ante la autoridad electoral, se precisa que Rojo de la Vega realizó una supeditación a una tercera persona, un hombre, por la simple y natural existencia de su vínculo filial, lo que encuadra de manera exacta con la figura estereotipada de invisibilización de su persona como mujer y profesionista.
Además, Monreal señaló que Rojo de la Vega desnaturalizó su existencia personal y la campaña política que realizó, ya que nunca se refirió a ella por su nombre, sino que se limitó a hacer referencia consistente y sistemática a “los Monreal” o “El Monrealato”, violando así sus derechos político-electorales, más aún cuando ostenta la calidad de candidata mujer a la Alcaldía Cuauhtémoc.
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