La presidenta de México, Claudia Sheinbaum Pardo, anunció la creación de la Secretaría Anticorrupción y de Buen Gobierno, en un esfuerzo por reforzar el combate a la corrupción y la impunidad, consolidando así los avances logrados durante el sexenio de Andrés Manuel López Obrador. Esta nueva dependencia surge a partir de la transformación de la actual Secretaría de la Función Pública (SFP), con un enfoque preventivo y transversal en todas las áreas de gobierno.
Durante su conferencia matutina “Las mañaneras del pueblo”, la mandataria destacó que esta iniciativa responde al mandato popular de erradicar la corrupción. “Pueden tener la certeza de que jamás va a haber una colusión o un acto de corrupción y que, si llega a haberlo, para eso está la Secretaría Anticorrupción”, afirmó Sheinbaum, subrayando el compromiso de su gobierno con la integridad y la transparencia.
Raquel Buenrostro Sánchez, actual secretaria de la Función Pública y futura titular de la Secretaría Anticorrupción, destacó que la corrupción afecta directamente la eficiencia gubernamental, genera desigualdades y limita el acceso a servicios públicos. Con esta nueva secretaría, el gobierno pretende que el combate a la corrupción sea preventivo, fortaleciendo la integridad en la función pública y modernizando la Administración Pública Federal (APF) a través de la digitalización.
Entre las acciones más destacadas que implementará la nueva dependencia se incluyen la dignificación del servicio público, la modernización administrativa, la transparencia proactiva y el acompañamiento preventivo a los programas prioritarios del gobierno, como el Tren Maya y proyectos del sector salud y seguridad alimentaria.
Asimismo, se buscará reformar las leyes de Adquisiciones y de Obras Públicas para garantizar compras transparentes y justas, así como promover la participación de pequeñas y medianas empresas en las contrataciones gubernamentales, eliminando la intermediación y fomentando una mayor eficiencia en el gasto público.
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Con la Secretaría Anticorrupción y de Buen Gobierno, el gobierno de Sheinbaum espera consolidar una nueva era de transparencia en México, proponiendo también reformas a la Ley General de Transparencia y promoviendo una mayor participación de la ciudadanía en la evaluación de las acciones gubernamentales. Buenrostro enfatizó que se fortalecerá la cultura de la denuncia y que se combatirán con firmeza la impunidad y la corrupción. “Buscamos cerrar la puerta a la corrupción definitivamente y combatir la impunidad”, concluyó.
Este nuevo enfoque marca un paso decisivo en la lucha anticorrupción en México, y se espera que, en sus primeros 100 días, la Secretaría Anticorrupción logre una reestructuración efectiva de la APF y establezca mecanismos para blindar los programas estratégicos del país, siempre bajo los principios de transparencia y eficiencia gubernamental.
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