El PAN solicitó este miércoles a la Secretaría de Inclusión y Bienestar Social, (SIBISO), a instrumentar brigadas de hidratación y de cuidado de la salud para las personas que se encuentran en situación de calle y que pueden ver comprometida su integridad física y vida ante las altas temperaturas que se han registrado desde hace varios días en la Ciudad.
A través del diputado Federico Chávez Semerena, se pidió a la dependencia, un informe de manera pormenorizada sobre las medidas que se están tomando por la ola de calor. “Conocer qué tipo de protocolos, medidas y brigadas de atención dentro y fuera de los albergues de la Ciudad se están implementando desde hace algunas semanas”.
Asimismo, el legislador panista apuntó que las olas de calor tienen consecuencias graves para la salud, especialmente para niños y ancianos.
Según la UNICEF, los fenómenos meteorológicos extremos como las olas de calor, que cada vez son más frecuentes e intensas, ponen en peligro las vidas de los niños.
“Las olas de calor pueden tener consecuencias graves para la salud humana, especialmente para los grupos con enfermedades crónicas. Algunos de los problemas de salud causados por ambientes calurosos son dolor de cabeza, náuseas, mareos, debilidad, irritabilidad, sed, sudor intenso, alta temperatura corporal, dermatitis, edemas, quemaduras, insolación, calambres, síncope por calor, agotamiento por calor, golpe de calor, entre otros”.
De acuerdo con datos recientes, es decir, del 2019, se estima que sólo en la Ciudad de México existen 4 mil 354 personas en situación de calle, siendo las alcaldías de Cuauhtémoc, Gustavo A. Madero, Venustiano Carranza e Iztapalapa, en donde se concentra un mayor número de personas, ya sea por la existencia de albergues o, simplemente porque en estas demarcaciones acuden muchas personas en esta situación a buscar un trabajo que les permita subsistir.
Este tipo de población no puede concentrarse en un solo grupo etéreo, ya que más bien, corresponde a la combinación de niñas, niños, adolescentes, mujeres, hombres, personas con discapacidad que pertenecen a diferentes razas o etnias, por lo cual es difícil delimitar por sus características, siendo lo único común que viven o usan la calle como su fuente de ingresos.
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Justamente esa característica de pernoctar o hacer de la calle su lugar de trabajo, ha sido sumamente complicado censar a esta población, sin embargo, algunos esfuerzos del INEGI en conjunto con organizaciones internacionales han estimado una cantidad más o menos cierta de personas en situación de calle, arrojando los siguientes datos:
El último censo realizado en la Ciudad de México, Diagnóstico Situacional de las Poblaciones Callejeras 2017-2018, mostró que el total de personas integrantes de las poblaciones callejeras ascendió a seis mil 754, de las cuales, cuatro mil 354 se encontraron en el espacio público y dos mil 400 en albergues públicos y privados; donde el 87.27 por ciento correspondió al género masculino y el 12.73 por ciento al género femenino.
En cuanto a las edades de esta población las mujeres de 18 a 59 años representaron el 11.29 por ciento del universo.
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