Trump y Harris preparan estrategias para debate del martes

Los candidatos a las elecciones presidenciales del 5 de noviembre, Donald Trump y Kamala Harris, se preparan de manera muy distinta para el crucial debate del martes en los estudios de la cadena ABC en Filadelfia, que probablemente será el único de la campaña electoral.

Aunque el anterior debate de Trump con Biden, el 27 de junio, precipitó la retirada de Biden, las expectativas para este nuevo encuentro no son tan altas. Sin embargo, lo ajustado de las encuestas y el hecho de que este pueda ser el único cara a cara le otorgan gran relevancia, especialmente entre los votantes indecisos.

Durante su último mitin en Wisconsin, Trump apenas mencionó el debate, salvo para sugerir que podría “destrozar” a Harris, aunque afirmó que los medios, según él, lo humillarían de todos modos.

Fiel a su estilo, el expresidente ha pasado días descalificando a Harris, criticando su inexperiencia y bromeando sobre su supuesto encierro para prepararse ante él.

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Por el contrario, Trump asegura no necesitar preparación: “He vivido con estos temas toda mi vida”, comentó, aludiendo a su estilo más improvisado. A pesar de sus declaraciones, sus asesores lo han hecho ensayar respuestas para las preguntas más difíciles, particularmente en torno a sus problemas legales.

Por su parte, Harris ha adoptado una estrategia más disciplinada, encerrándose durante cinco días en un hotel en Pensilvania, simulando un escenario similar al del debate, con un doble de Trump que emula su estilo.

Las reglas del debate han sido cuidadosamente negociadas por ambos equipos, incluyendo comparecencias sin público, tiempos de intervención medidos y la polémica sobre los micrófonos silenciados.

El equipo de Harris intentó sin éxito mantener los micrófonos abiertos para evitar desventajas en los intercambios directos. A pesar de las críticas constantes de Trump hacia la cadena ABC, que según él favorece a Harris, no parece probable que se retire del debate, confiando en su habilidad escénica.

El encuentro del martes promete ser decisivo en una campaña llena de tensión, donde cada movimiento cuenta en un escenario tan impredecible.