El cumplirse 56 años de la trágica matanza del 2 de octubre de 1968, la Ciudad de México se detiene en un solemne acto para honrar la memoria de los jóvenes que perdieron la vida en esa fatídica fecha.
Durante la Sesión Solemne en el Congreso de la Ciudad de México, la coordinadora de la Asociación Parlamentaria Mujeres por el Comercio Feminista e Incluyente, Silvia Sánchez Barrios, destacó el impacto histórico de estos hechos y su legado en la lucha democrática de México.
“Balas de cobardía y rencor interrumpieron las vidas de miles de jóvenes hace 56 años”, señaló Sánchez Barrios, al iniciar su discurso.
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“Este hecho causó un daño irreparable en la conciencia colectiva y ha definido cómo hemos evolucionado como sociedad”, agregó.
Para la legisladora, la herencia del movimiento estudiantil de 1968 radica en la lucha por mayores libertades, las cuales hoy son una realidad en gran parte gracias a ese sacrificio.
Sánchez Barrios subrayó que el movimiento del 68 fue un cimiento crucial para el avance democrático del país. “Sin esa lucha que costó muchas vidas, seguiríamos en un modelo autoritario, plagado de violencia, censura y posturas antidemocráticas”, afirmó.
En su opinión, fue gracias a ese movimiento que México logró consolidar instituciones en favor de la democracia, crear partidos de oposición y avanzar en la democratización de los procesos electorales.
“La historia no es cíclica”, recordó Sánchez Barrios, haciendo hincapié en la importancia de evitar que una tragedia como la del 2 de octubre se repita.
“Aprendimos del pasado, y siempre tendremos presente en la conciencia las luchas que hoy forjan un nuevo futuro”, reflexionó.
La legisladora enfatizó que hoy México cuenta con una sociedad más comprometida, plural y organizada, preocupada por la defensa de los derechos humanos y enfocada en el bienestar social.
“Es un compromiso grande defender las causas ciudadanas, pero se hace más fácil cuando los propios ciudadanos te acompañan, te exigen y te vigilan”, dijo desde la tribuna, resaltando que la participación ciudadana es uno de los grandes legados del movimiento estudiantil de 1968.
Finalmente, Sánchez Barrios cerró su intervención con una cita de la escritora Elena Poniatowska, recordando el poder del silencio en tiempos de opresión: “Ha llegado el día en que nuestro silencio será más elocuente que las palabras que ayer callaron las bayonetas”. Con esta frase, la legisladora hizo un llamado a seguir honrando la memoria de aquellos que dieron su vida por un México más libre y democrático.
La conmemoración de la matanza del 2 de octubre sigue siendo un recordatorio de la importancia de la lucha por los derechos y las libertades que hoy se disfrutan, pero que fueron obtenidas a un alto costo.
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