Antes el sistema educativo rezagado, hoy, ¿la mediocridad como objetivo?
Por el Dr. Horacio Rafael Rodríguez Montalvo
Uno de los grandes problemas que tiene nuestro país, es el sistema educativo, que ya mostraba un gran rezago hace décadas, pero hoy enfrenta una mayor dificultad. En el mundo de demostrar poder, se plantea cambiar visiones, reglas, procesos y hasta derechos de los niños para ser preparados para enfrentar grandes retos sociales, económicos, ambientales, y muchos más.
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Cultura y la Ciencia (UNESCO), así como especialistas en ciencias de la educación, sugieren contar en todos los países, con el modelo STEAM en los sistemas de enseñanza. Dicho modelo significa integrar las disciplinas de Ciencia, Tecnología, Ingeniería, Artes y Matemáticas (STEAM, por sus siglas en inglés) en el proceso de aprendizaje. Busca empoderar a los estudiantes para que sean aprendices activos, creativos y colaborativos, preparándolos para enfrentar desafíos y fomentando un pensamiento más integral y abierto a la interconexión de diferentes disciplinas y enfoques.
México responde, después de años de abandono al sistema, de una pandemia que hizo más grande la brecha educativa en los jóvenes, con un plan de estudio y libros, con cargas ideológicas sin oportunidad de ser criticadas, aceptaciones de errores gramaticales, lenguaje, conceptualización, con el pretexto de justificar que así se habla en nuestro país y que debemos ser “incluyentes” aceptando dichos errores y con una disminución significativa de áreas científicas como matemáticas.
Los especialistas en pedagogía y ciencias de la educación, han planteado los riesgos de aceptar está imposición del gobierno. En este espacio, busco dar el impacto psicológico que tendrá el disminuir el nivel de exigencia y de áreas que aportan en el desarrollo de la persona, más allá de hacerlo o no competitivo para trabajar.
Estudiar ciencias y matemáticas tiene un impacto significativo en el desarrollo psicológico del niño. Estas materias no solo contribuyen al crecimiento intelectual y cognitivo, sino que también influyen en su desarrollo emocional y social. Aquí hay algunos aspectos del desarrollo psicológico que se ven influenciados positivamente por el estudio de ciencias y matemáticas:
- Pensamiento lógico y habilidades de resolución de problemas: ayuda a los niños a desarrollar habilidades de resolución de problemas. Aprenden a identificar patrones, analizar datos, plantear hipótesis y llegar a conclusiones basadas en evidencia.
- Desarrollo cognitivo y habilidades: Estas habilidades ayudan a los niños a desarrollar su capacidad para procesar información y aplicar conocimientos en diferentes contextos.
- Fomento de la curiosidad y la creatividad: Las ciencias naturales y la matemática abren la puerta a un mundo de descubrimientos y posibilidades. Los niños desarrollan una mayor curiosidad acerca de cómo funciona el mundo y qué fenómenos rigen los procesos naturales. Esto también puede fomentar su creatividad al buscar soluciones innovadoras a problemas y situaciones complejas.
- Autoconfianza y autoeficacia: Dominar habilidades en ciencias y matemáticas puede aumentar la autoconfianza y la percepción de autoeficacia en los niños. El éxito en estas áreas puede llevar a una mayor sensación de logro y una actitud positiva hacia el aprendizaje en general.
- Habilidades de investigación y pensamiento crítico: aprendiendo a evaluar la información, cuestionando afirmaciones y llegando a conclusiones basadas en evidencia.
- Colaboración y trabajo en equipo: promueve habilidades sociales, como la comunicación efectiva, el trabajo en equipo y la empatía hacia los compañeros.
- Resiliencia y tolerancia a la frustración: Aprender a lidiar con la frustración y seguir adelante después de cometer errores es una parte importante del desarrollo psicológico.
En general, el estudio de ciencias y matemáticas proporciona una base sólida para el desarrollo intelectual, emocional y social de los niños. Estas materias no solo les brindan conocimientos específicos, sino que también cultivan habilidades y actitudes fundamentales que son valiosas en su crecimiento y desarrollo en diferentes aspectos de la vida. Los cuales, con los nuevos planteamientos y libros, simplemente no se lograrán.
Este tema va más allá de los neoliberales contra los humanistas, es un tema que tendrá impacto en el desarrollo psicológico de los niños y jóvenes. Con esto, nadie se niega a buscar cambios para mejorar la formación en las aulas, pero se sugiere hacerlo de forma estructurada y avalada por expertos en educación como en cada tema que conformen el programa de estudios.
Parece que antes el no querer ser “mediocre” era un estímulo para estudiar, y hoy parece que es la meta a lograr.
Horacio Rafael Rodríguez Montalvo es egresado de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Licenciado por la Facultad de Psicología, con formación en psicología clínica, educativa, organizacional y social. Maestría y doctorado en ciencias de la administración, con especialidad en comportamiento organizacional.
Doctorante en la Facultad de medicina, en el área de ciencias de la salud con especialidad en salud mental en el trabajo. Consultor y conferencista en transformación organizacional – humano, en diversas empresas privadas y públicas.
Docente en los niveles de licenciatura, maestría, doctorado, especialidad y diplomado, en las carreras de: Psicología, administración, educación, mercadotecnia, alta dirección y desarrollo humano.
Especialista invitado en programas radiofónicos, publicaciones en periódico, revistas impresas/ electrónicas, redes sociales, plataformas y televisión con temas del comportamiento humano.
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