El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, destituyó este martes a Yoav Gallant como ministro de Defensa debido a discrepancias con la gestión de la guerra en Gaza. El mandatario nombró como su sucesor a Israel Katz, quien hasta ahora se desempeñaba como titular del Ministerio de Asuntos Exteriores.
En un comunicado oficial, Netanyahu explicó que las diferencias entre Gallant y él eran “significativas” y se centraban en la conducción de la campaña militar en Gaza.
“Estas brechas fueron acompañadas de declaraciones y acciones que contradecían las decisiones del Gobierno y del Gabinete”, afirmó Netanyahu, señalando que sus intentos por resolver la situación habían fracasado.
El comunicado también indicó que las diferencias entre ambos llegaron al público de una manera inaceptable y, lo que es más grave, fueron aprovechadas por los enemigos de Israel, lo que “les permitió obtener beneficios”.
Un cambio clave en la estrategia de defensa.
El nuevo ministro de Defensa, Israel Katz, ha sido descrito por Netanyahu como una figura de confianza, destacando su experiencia en diversos cargos clave, como el Ministerio de Finanzas e Inteligencia. Katz se enfrentará ahora a uno de los mayores desafíos de su carrera, gestionando una guerra que ha generado tensiones internas en el gobierno y un creciente descontento público por los resultados de la campaña.
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Además, Netanyahu reveló que ofreció a su exsocio político y rival, Gideon Saar, asumir el cargo de ministro de Exteriores. Saar, quien hasta ahora se mantenía como ministro sin cartera, podría sumarse a la coalición en los próximos días.
Choques en la estrategia militar.
Las tensiones entre Netanyahu y Gallant se intensificaron a medida que avanzaba la guerra en Gaza, con objetivos no cumplidos, como el regreso de los casi cien rehenes israelíes retenidos por Hamas. Gallant había sido firme en su postura sobre la necesidad de revisar los objetivos militares, incluyendo un enfoque en el alistamiento de judíos ultraortodoxos al Ejército, lo que había generado desacuerdos con la coalición gobernante.
A finales de octubre, Gallant envió una carta al gabinete, excluyendo al ministro de Seguridad Nacional, Itamar Ben Gvir, en la que sugería que los objetivos de guerra debían ser reevaluados. Netanyahu respondió rápidamente, reafirmando que la única “brújula” en la guerra eran los objetivos aprobados por el Gabinete, los cuales estaban siendo revisados constantemente.
Las fricciones no eran nuevas. En septiembre, Gallant se había opuesto a una ofensiva a gran escala en Líbano, lo que provocó nuevos rumores sobre su posible destitución.
El 1 de septiembre, Gallant incluso presionó al Gabinete para revertir la decisión de mantener tropas israelíes en la línea divisoria con Gaza, una medida que Netanyahu consideraba crucial.
El retorno de las tensiones políticas.
Cabe recordar que esta no es la primera vez que Netanyahu destituye a Gallant. En marzo de 2023, el ministro fue despedido después de que criticara públicamente la reforma judicial del gobierno, lo que desató masivas protestas. Sin embargo, Gallant fue readmitido a su cargo debido a la presión popular y el descontento por su destitución en medio de la crisis política.
El cese de Gallant y la llegada de Katz a Defensa reflejan una nueva fase en el manejo de la guerra en Gaza, en medio de un panorama político y militar cada vez más complejo para Netanyahu.
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