Valencia enfrenta una crisis humanitaria a raíz de las intensas lluvias que han azotado la provincia y dejado al menos 92 muertos, mientras unas mil 200 personas permanecen atrapadas en diversas áreas de las autopistas A-3 y A-7 debido a las inundaciones, informó la Guardia Civil. La situación también ha provocado el bloqueo de aproximadamente 5,000 vehículos.
La Guardia Civil ha instado a la ciudadanía a evitar desplazamientos no imprescindibles y a seguir las indicaciones de las autoridades para garantizar su seguridad.
Para afrontar la emergencia, el cuerpo ha desplegado un operativo con 750 agentes especializados provenientes de diferentes regiones del país, además de 300 vehículos, seis helicópteros equipados con grúas y cámaras, y varias embarcaciones.
Hasta el momento, se han realizado cerca de 2,500 rescates, con esfuerzos concentrados en el auxilio y rescate de personas afectadas, así como en la prevención del pillaje.
Asimismo, las autoridades trabajan en asegurar las vías de comunicación y en mantener la “disciplina del tráfico” para facilitar el desplazamiento de los servicios de emergencia.
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La Guardia Civil también participa en la identificación de cadáveres como parte de sus funciones de policía judicial, con el apoyo de un equipo de criminalística especializado enviado desde Madrid.
Las áreas más afectadas por el temporal se encuentran en las cercanías de Llíria, Requena y la comarca de l’Horta Sud, incluyendo municipios como Chiva, Cheste, Vilamarxant, Riba-roja, Alfafar, Benetússer, Paiporta, Torrent, Aldaia, Mislata y Xirivella.
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