Los festejos de los aficionados de los Kansas City Chiefs por la obtención del Super Bowl terminó en tragedia después de que se dio un tiroteo y una persona perdió la vida.
Durante el evento que escucharon algunas detonaciones y los reportes informaron que varias personas terminaron heridas.
John O’Connor, uno de los testigos de la balacera, dijo que fueron alrededor de 15 disparos. Los cuerpos de seguridad consiguieron detener a dos presuntos involucrados en este atentado, donde resultaron heridos entre ocho a diez personas, aunque aún no se han dado a conocer las cifras oficiales.
Al igual que se apuntó a que los aficionados de Kansas City fueron quienes lograron detener a uno de los presuntos involucrados en el ataque. Además de que intentaron revivir a uno de las víctimas.
Según dijo el capitán Jake Becchina, portavoz del Departamento de Policía de Kansas City, “se detectaron disparos en el oeste de Union West cerca de un garaje. Y varias personas resultaron heridas”.
Asimismo, aseguraron que detuvieron a tres posibles sospechoso de protagonizar el atentado. Pero para llevar a buen puerto las investigaciones pidió que “la gente salga del área lo más rápido y seguro posible. Y evitar el estacionamiento para facilitar la atención para las víctimas del tiroteo”.
Lisa Augustine, portavoz del Hospital Infantil Mercy Kansas City, aseguró que el hospital “está recibiendo pacientes del desfile”. No sabía cuántos y no dio detalles de las lesiones.
El gobernador de Misuri Mike Parson y la primera dama estaban en el desfile cuando se detonaron los disparos pero se encuentran bien, dijo Parson en la red social X.
“El personal de policía estatal está asistiendo a la autoridad local en su respuesta”, publicó Parson. “Mientras esperamos para conocer más, nuestros corazones están con las víctimas”.
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